viernes, 17 de octubre de 2014

Lanzan el satélite argentino Arsat-1

Por Lucas Viano de La Voz del Interior
Argentina ingresó a un selecto grupo de países con capacidad para construir satélites de telecomunicaciones. A las 18 y desde la Guayana Francesa, se lanzará el Arsat-1, el primero en su tipo de América latina.
Las otras naciones que diseñan sus propios satélites de telecomunicación son EE.UU., la Unión Europea, Japón, Israel, Rusia, India y China.

El Arsat-1 fue diseñando y ensamblado por la empresa Invap, de Bariloche. Los paneles solares, la estructura, la computadora de vuelo y el software de control fueron realizados en Argentina. Es sistema de antenas) es de origen francés y la propulsión es alemana.
Si todo sale bien, el satélite estará operativo dentro de unas semanas. Los principales beneficiados serán los sitios aislados del país en donde es difícil llegar con sistemas de comunicación (teléfono, televisión, Internet) a través de cables.

Matías Bianchi, presidente de la empresa estatal Arsat que operará el satélite, explicó que los servicios del satélite llegarán a escuelas rurales y otros puntos del país a los que no puede acceder la fibra óptica.
Permitirá que estos sitios puedan acceder a servicios de Internet, telefonía IP (a través de Internet) y al servicio de Televisión Digital Terrestre (TDT) impulsado por la Nación. También se podrá alquilar el servicio a terceros.

Por ahora Argentina alquila un satélite para ocupar su posición orbital a un costo anual de 25 millones de dólares.
Inversión

El Arsat-1 comenzó a diseñarse en 2007. Se han invertido 270 millones de dólares para un artefacto que tendrá una vida útil de 15 años.
Invap ya tiene experiencia en la creación de satélites, aunque para uso científico. El mejor ejemplo es el SAC-D/Aquarius lanzado en 2011 con la Nasa.

Los satélites de telecomunicación tienen otras dificultades. Para empezar, son más grandes (tres toneladas, contra los 1.600 kilos del SAC-D) y tienen una vida útil mayor (15 años, contra los cinco años del SAC-D).
Además, deben ser fiables para el mercado, ya que deben transmitir información importante desde una señal televisiva hasta datos bancarios.

La tarea del satélite es difundir la información. Tomar una señal potente y concentrada y dispersarla en señales más débiles pero distribuidas en un territorio. En el caso del Arsat-1, su área de cobertura es Argentina y los países limítrofes.

El despegue

El lanzamiento es un proceso crítico. El cohete será el Ariane 5, un vector muy exitoso con 60 misiones sin problemas. Si el clima es el adecuado, el lanzamiento ocurrirá a las 18.
La primera etapa durará dos minutos y estará a cargo de dos cohetes de combustible sólido. La siguiente, el cohete central criogénico, le dará el impulso final para liberar al satélite a 250 kilómetros de altura en una órbita elíptica y a unos 33 mil kilómetros por hora.

A partir de allí, la estación terrena de Arsat, ubicada en Benavídez (Buenos Aires), tomará el control y comenzará a transferir al satélite a su órbita definitiva. Estará a 36 mil kilómetros de altura (tres veces el diámetro de la Tierra) y acompañará la rotación de nuestro planeta, siempre “mirando” a Argentina.
Se diferencia SAC-D/Aquarius, el cual orbita a 657 kilómetros de altura y da vueltas alrededor de la Tierra para poder mirar toda su superficie.

El Arsat-1 es el primero de tres satélites de telecomunicaciones que está fabricando en Argentina. El Arsat-2 ya está en la etapa de ensayos y se prevé su lanzamiento en 2016.
Momentos clave

Despegue. Si bien el Ariane 5 es un cohete confiable, el despegue es un momento crítico, debido a la cantidad de combustible almacenado y a las vibraciones y fuerzas a la que será sometido el satélite.
Desacople. El momento en que el cohete libera al satélite también es clave, ya que debe realizarse de manera precisa para evitar un gasto de combustible extra durante las maniobras posteriores.

Primera comunicación. El encendido y primera comunicación con el satélite también será crucial. Con el Arsat-1 ya en el espacio, no hay formas de realizar tareas de reparación. Luego habrá que esperar que todos los sistemas respondan en forma correcta

martes, 7 de octubre de 2014

Ropa de bebé para ayudar a mamás jóvenes

El Programa de Ayuda a la Comunidad Escolar Rural (PACER) de OSPRERA impulsa una nueva campaña solidaria, "Ayudemos a las Madres Adolescentes", que consiste en recolectar ropa de bebé en buen estado para donar a comunidades rurales en donde existen altos índices de embarazo adolescente. 

Esos bebés, que llegan al mundo con carencias que sus propias madres también padecen, necesitan de la colaboración de todos para salir adelante. Además de los problemas de alimentación y vivienda, necesitan vestirse, y su rápido crecimiento dificulta la provisión de vestimenta adecuada. 

Todos los interesados pueden comunicarse con el Programa para coordinar la manera de acercar  la donación.

Juntos podemos vestir a bebés que con lo único que cuentan, es con el amor de sus mamás, y con nosotros!