martes, 15 de marzo de 2011

Llevamos ayuda al Paraje Ibirá Pitá, en Corrientes

Desde el Programa de Ayuda a la Comunidad Escolar Rural (PACER) de OSPRERA (Obra Social para el Personal Rural y Estibadores de la República Argentina), coordinado por la Dra. Bibiana Mónica Ruibal, acabamos de enviar ayuda a la Escuela Nº 580 “Isaura Guadalupe Romero”, de Paraje Ibirá Pitá, Departamento de Mercedes, en Corrientes.

El establecimiento se encuentra ubicado en una zona inhóspita y alejada de los Esteros del Iberá. Allí, la directora de la escuela, Mercedes Viana, y la docente Alejandra Pelozo, recibieron a través de Transporte Piloni nueve cajas de ropa, calzado, útiles escolares, juguetes, dos bicicletas donadas por clientes de Bicicletaría Nodari (reparadas y acondicionadas para la donación por su dueño, Claudio Nodari) y una cocina nueva Marca “Martiri” Starcristal para gas envasado.

De esta forma, el PACER continúa en acción para ayudar a más niños argentinos del campo a estudiar y a crecer.

lunes, 14 de marzo de 2011

14 DE MARZO - Día de las Escuelas de Frontera

Integrarse, más allá de las dificultades

Las más de 10.000 escuelas de frontera de nuestro país no sólo deben sobreponerse a diario a las dificultades a que sus propias geografías las someten, sino que deben sufrir también el olvido que les dispensan los entes gubernamentales (abocados a otras cuestiones más expuestas) y la mayoría de la sociedad, que no ve como algo cercano este problema. Este día debe ser aprovechado para sembrar conciencia en los alumnos sobre esta problemática, y alimentar la virtud de la generosidad.

En la Argentina, hay millones de chicos que cada mañana viajan un promedio de 30 minutos en el micro escolar o en colectivos de línea para ir a la escuela. Otros tantos, se suben a su bicicleta o caminan unos 5 ó 10 minutos con el mismo objetivo. Algunos otros, quizás un poco más afortunados, se suben todavía un poco dormidos al auto de sus padres, que los llevan hasta el colegio.

En alguna de estas tres situaciones cuadra, seguramente, la realidad de la gran mayoría de los alumnos de nuestro país, donde la educación primaria es obligatoria, y suele impartirse en escuelas de jornada simple o de jornada completa.
Sin embargo, hay también otra realidad paralela, menos usual, menos conocida, pero igual de real: cientos de miles de niños argentinos concurren todos los días a diferentes tipos de escuelas no convencionales, como por ejemplo:
- Escuelas Hogares: Para niños en edad escolar pertenecientes a familias con graves problemas socio-económicos, que reciben educación integral en régimen de internado.

- Escuelas Hospitalarias: Destinadas a niños que permanecen internados en hospitales, para mantenerles la escolaridad.

- Escuelas Domiciliarias: Se dictan clases en hogares de niños y adolescentes con problemas físicos (transitorios o permanentes) que les impiden la concurrencia a la escuela.

- Escuelas de Frontera: Pertenecen a la jurisdicción provincial y su propósito es el desarrollo, promoción prioritaria e integración plena de esas jurisdicciones a la vida nacional, según establece la Ley Nº 19.524.

Escuela del Paraje Naranjito,
provincia de Corrientes
FOTO: Marcelo Gutiérrez

Precisamente, el "Día de las Escuelas de Frontera" fue instituido por medio del Decreto Nº 1531 del Poder Ejecutivo Nacional, en conmemoración del día de aprobación de la ley 19.524, sancionada el 14 de marzo de 1972 para proteger y desarrollar las escuelas en zonas y áreas de frontera.

A lo largo de las extensas fronteras de nuestro país (9.376 kilómetros) existen alrededor de 11.000 escuelitas (contemplando no sólo aquellas ubicadas estrictamente en zonas fronterizas, sino haciendo extensiva la consideración a un área un poco más amplia, incluyendo las llamadas escuelas rurales -que en todos los casos están alejadas de zonas urbanas-).

Estos establecimientos educativos suelen estar en zonas aisladas y de acceso un tanto complicado, y muchos de los alumnos que concurren a ellos deben recorrer enormes distancias, todos los días, para poder acceder a su educación básica.
En general, en las escuelas de frontera los niños están a cargo de un único maestro, y pasan allí todo el día, pues se les brinda además de la educación su alimentación básica, en muchos casos la única que pueden recibir.

Estas escuelas no podrían subsistir de no ser por la profunda vocación y el enorme cariño de los docentes, que no son sólo maestros sino también en muchos casos casi padres de sus alumnos, y se encargan de todas las tareas y necesidades de la vida en los establecimientos: comidas, vestimenta, útiles, mantenimiento, salud.
Las carencias y las dificultades son muchísimas, quizás demasiadas para lo que un ser humano medio, acostumbrado a las comodidades y facilidades de las grandes urbes, podría soportar. Pero gracias a estos miles de "héroes" que podemos encontrar a lo largo de todo nuestro país, hay muchos chicos que aún pueden soñar con forjarse un futuro mejor para ellos y sus familias.

Aun en sus precarias condiciones de infraestructura, alimentación y sanidad, los chicos aprenden no sólo a leer, escribir o sumar, sino también a trabajar la tierra o criar animales para generar producción para su propia subsistencia. De todos modos, la solidaridad de los alumnos y de las comunidades urbanas sigue siendo de gran ayuda para su mantenimiento y evolución, pero sobre todo para sentirse acompañados y queridos, para sentir que también ellos son argentinos y, desde su lugar, forjan día a día nuestra Nación. No los dejemos solos.

Más información:
www.apaer.com.ar

viernes, 4 de marzo de 2011

Volver al cole


Esta semana, para la mayoría de los pequeños educandos comenzaron las clases. Se veían por todas partes guardapolvos y uniformes flameando en sogas de colgar la ropa, zapatos lustrados y peines luchando con cabelleras rebeldes.

El primer paso para todo un año de trabajo fecundo se debe dar con el pie derecho; la educación forja los espíritus prolíficos del futuro.

Hace más de 40 años, así se reflejaba la ansiedad y el entusiasmo estudiantil en un libro de texto escolar:

“La tarea Comienza”

Inquietos, con los rostros radiantes, los niños van entrando en la escuela.
¡Que alegría muestran al encontrarse otra vez con sus buenos compañeros del curso anterior!
Un comentario aquí, un recuerdo risueño allá y…ya la campana los llama al deber. Es la voz de la escuela, que parece decirles:
“El descanso ha terminado; a trabajar de nuevo, que el estudio os hará mejores y la Patria necesita de vuestros esfuerzos”.
…Leemos en tus ojos esta pregunta: ¿Cómo realizarlo?
¡Alégrate! Tu cariñosa y afable maestra logrará descubrir, en el fondo de tu corazón, todo lo bueno y noble que él guarda. Hará despertar tu entusiasmo e interés por las cosas nuestras; acrecentar tu amor por esta tierra bendita, por sus ríos rumorosos, sus feraces llanuras, donde pace abundante ganado, y sus montañas, que guardan valiosos tesoros.
Sentirás admiración por la vida ejemplar de muchos patriotas que, con empeño, nobleza y desinterés, forjaron la grandeza de esta Patria, de cuya felicidad hoy disfrutas.
Experimentarás emoción al conocer el sacrificio realizado por otros seres, en bien de la humanidad.
¡Imita estos nobles ejemplos!
Estudia con dedicación. La tarea empieza…

Fragmento del libro de lectura para cuarto grado “Manantial” de Editorial Kapelusz , de octubre de 1967.